jueves, 5 de noviembre de 2009

Viceversa

No me estalla mi mente
si digo una vez mas la verdad
No me juzga mi inconciente
si se a donde quiero llegar

No acudo a la demencia
si al andar vuelvo a caer
Solo busco esperanzas
libertad y fé

Me envuelves tantas veces
como un insomio vaiven
Me conviertes tantas veces
un estigma en la pared
No me claves emociones
en el fondo de mi cien
No me digas y perdones
el juicio del placer
Solo busca dentro mio
los sentidos de mi ser

Vuelo alto y no caigo
desde arriba quiero ver
La indomitas creencias
de los sueños alreves

Navego entre mareas
dificiles de entender
Me sosiego ante su espada
que me intenta vencer

Me envuelves tantas veces
como un insomio vaiven
Me conviertes tantas veces
un estigma en la pared
No me claves emociones
en el fondo de mi cien
No me digas y perdones
el juicio del placer
Solo busca dentro mio
los sentidos de mi ser

Me sumergo en su juego
de delirios y sentidos
Solo queda en mi aullido
dormir en su abismo

Me envuelves tantas veces
como un insomio vaiven
Me conviertes tantas veces
un estigma en la pared
No me claves emociones
en el fondo de mi cien
No me digas y perdones
el juicio del placer
Solo busca dentro mio
los sentidos de mi ser


Fede G. 09

lunes, 14 de septiembre de 2009

Oda de los sueños

Ostinando, el aire fresco
de las sierras, claras e inauditas
Atenuado y arraigado
al placer encontrado

Vuelas alto, yo no caigo

Me demuestras que no soy
el unico que piensa que
alli puedes encontrar
tu locura y serenidad

Vives siempre, idealizando

y siento que siempre me elevo
lento y rapido al mismo tiempo
Algo semejante a lo que siento
cuando creo en tu cuerpo

Casi siempre, atormentados
Casi siempre, desencontrados

a la deriva los dos
juntos en el cielo, juntos en el infierno
también mi demencia
y en el arte de tu escencia

Es mi locura, la que intenta
ver mas lejos de lo cierto
Es mi estandarte el que juzga
al que poco actua

Otra vez, cayendo

es tu escencia la que hace
que siempre viva en un sueño
que germina dentro mio
lo mismo de tu pecho

Fede G. 09

miércoles, 29 de julio de 2009

Idilio idealista

Me han cansado
las promesas vanas
de querer
un nuevo cielo, un nuevo mar

Me han atormentado
las indomitas palabras
de la guardia
de mi coraza, de mi tranquilidad

Ha soplado
el viento fuerte y contundente
pero no me ha derribado

He anhelado
centenar de situaciones
de promesas vanas
gratitudes y demas

Tan solo soy
Un pobre idealista
que ha pensado
que todo se podia cambiar
Que podia, erizar su piel
sus sentidos, y su corazon

y ahi nomas, ha caido
entre la calma, la inquietud
el hedonismo de aquella bella mujer

Me he acordado
de aquellas corridas
sin llegadas, ni comienzos
ni final

He sabido
germinar mis deseos
en tus sueños y solsticios

He podido
navegar en sus mareas
de calores y estruendos

Agonizando, tendido en su pecho
Sobrevolando en su interior
Cayendo claro, muy cerca, sin miedo
Me he apresado a su calor

No me da el tiempo
En nuestro idilio idealista
En nuestros sueños infinitos de soñar
Nuestro idilio es claro
no buscamos nada, pero algo queremos encontrar
y sentir, en nuestro interior un nuevo frenesí

Fede G. 09

lunes, 13 de julio de 2009

En analfabeto Politico

El peor analfabeto es el analfabeto político

No oye, no habla, no participa de los acontecimientos políticos.

No sabe que el costo de la vida, el precio del poroto, del pan, de la harina, del vestido, del zapato y de los remedios, dependen de decisiones políticas.

El analfabeto político es tan burro que se enorgullece y ensancha el pecho diciendo que odia la política.

No sabe que de su ignorancia política nace la prostituta, el menor abandonado, y el peor de todos los bandidos que es el político corrupto, mequetrefe y lacayo de las empresas nacionales y multinacionales.

Bertolt Brecht


Hay hombres que luchan un día y son buenos. Hay otros que luchan un año y son mejores. Hay quienes luchan muchos años, y son muy buenos. Pero hay los que luchan toda la vida, esos son los imprescindibles.

sábado, 11 de julio de 2009

Abril

Recuerdos y Vida
Sueño y avaricia
¿Qué mas queda por jugar?
¿Cuanto más podemos avanzar?
¿Qué podemos recordar?

Nuestras mentes deambulaban en abril
Entre los ojos siniestros de tu coraza inaudita
Un estigma, una daga clavada en mi pecho
las flores amanecian y chocaban contra el viento

El verde pastizal nos acomodaba en una eterna melodia
Yo buscaba el cielo, vos buscabas la tierra
Los dos viviamos en una eterna demencia

Queríamos alcanzar lo más lejano,
navegar en mares intensos
en mareas inquietas
Nos perdiamos en el viaje
En lo indomito de nuestro tiempo

Mis respuestas eran tus dudas,
y mis dudas tus respuestas
Mis noches tus desvelos,
El solsticio nuestros juegos

Recuerdos y Vida
Sueño y avaricia
¿Qué mas queda por jugar?
¿Cuanto más podemos avanzar?
¿Qué podemos recordar?

Las melodias de Luis Alberto
las cuerdas de Norberto
Sobrevolaban en Abril...

Las palabras de Julio
La simpleza de la vida...
Interpretaban nuestro abril...

El fuego de nuestras almas
ansiaban las esperanzas
el candente sentimiento
del eterno memento

Secuestraba mi interior
mis palabras se jactaban
Mis sueños florecian
en lo mas extraño de tu esencia

Tu piel rasgaba las esferas de mi alma
Nuestros sueños nos resguardaban

Los cantares de Silvio
Los poemas de Neruda
Germinaban nuestro Abril

Las atonitas verdades
Las mil y una oportunidades
Besaban nuestro Abril

¿Qué mas queda por jugar?
¿Cuanto más podemos avanzar?
¿Qué podemos recordar?

y asi besabamos nuestro estandarte
y asi creiamos en el cielo
asi nos respaldabamos
asi creiamos y asi creciamos

Nos vamos, nos marchamos
Volviamos, Continuabamos
Ansiabamos y anhelabamos
el eterno amor

¿Cual es nuestro amor?
¿Cual es nuestro deseo?
¿Que añoramos, que deseamos?
¿Que sacrificamos, que abandonamos?
¿Qué cambiamos?

Fede G. 09

sábado, 4 de julio de 2009

Plus Ultra

















Y mientras miro las olas
el viento fecunda la crisálida
la salida, la entrada,
no hay rumbo, no hay lugar

quiero imaginar...

y mientras sacudo mi mente
un pestañar anhela mi soñar
arraigado a las caricias
a la fugacidad y tempestad

quiero imaginar...

Nada mas, que este mas allá
entre el viento y la marea
la plena hedoneidad

Junto a mi nuevo andar,
anhelo y siento, un nuevo llegar

y mientras alcanzo lo divino
un nuevo fruto se presentara
no busco lo que encuentro
y no encuentro lo que busco

solo quiero ver...

Nada mas, que este mas allá
entre el viento y la marea
la plena hedoneidad

Junto a mi nuevo andar,
anhelo y siento, un nuevo llegar

Locura y simpleza, hedonismo y placer
la vida y la agonia, la razon y la locura
nubes y mar... lejos de ver la oscuridad
cielos y soles... cerca de alcanzar

Imaginar y volar...

Que tienta a mi mente,
me envuelve en su guiar
Que eriza mis sentidos
Su tiezo carmin

Que cree alcanzar
el fruto mas divino
La plena irrealidad
el amor ideal

Que juzga a mi inconciente
y atrae a mi conciente
Que brota en mi conciencia
la mas cruda firmeza

Que juega en mi conciencia
disfrutando del placer
Que idealiza mis sentidos
hacia el amor otra vez

Digo No y Más alla
Que quiero recrear
El futuro incierto
El pleno Carpe Diem

Mas alla, Mas allá...
busco lo irreal
Mas allá, Mas allá..
Ultra escencia demencial...


Fede G. 09

martes, 2 de junio de 2009

El Hombre

Un dia soñe con un hombre
el cual buscaba la libertad
No solo la propia
si no la de todos en general

Un dia soñe con un hombre
que luchaba por cambiar
cambiarse a si mismo
y a cambiar a los demàs

Un dia soñe con un hombre
que combatia a la desigualdad
a la exclavitud y marginalidad
del sistema demencial

Su rostro amanecia en las noches
de las sierras a conquistar
Su rostro sentenciaba la esperanza
de mil almas buscando un soñar

Un ideal arraigado, al compromiso y la fidelidad
Un ideal apagado, por el presente equivocado
Un ideal germinado en las almas desesperadas
Desesperadas por el bien, la justicia y el valor
Lo que él queria dar

Un dia desperte con un canto
que me provocaba inquietud
Un dia ameneci idealizando
un futuro esperado

Me sofocaban sus palabras, su atroz valor
Sus inquietudes y ambiguas, esperanzas de accion
La dignidad en su rostro, su grito incaucado de revolucion

Vio que en el presente, vivia la lucha
que el futuro era el fruto de nuestra aventura
Aquella que intentaba desarmar la realidad
Aquella que el imperio no queria soportar

No era solo un fusil, era mas que palabras
No era un combate en vano, era el llanto marginal
Lo que lo llevo, a estar donde esta

De una estrella ha bajado,
con ella ha sabido actuar
Entre la selva y las sierras
el viento no se detendra

Mas alla del bien y del mal
nos hablara de la libertad
Mas alla de los triunfos y los fracasos
su grito encendera

Me han dicho que no has triunfado
solo pocos entenderan
Que el triunfo no es la victoria
Sino el arte de soñar
y pensar...
que todo se puede cambiar

Fede G.09

miércoles, 29 de abril de 2009

El Camino de un Peregrino

Realizado para un trabajo de la RICE (www.conveniorice.blogspot.com) , en Convenio con mi Colegio (Instituto
Pedro Poveda)


Prólogo
“El camino de santiago fué la principal vía de peregrinación europea a partir del siglo XII, consistía en un viaje hacia un lugar sagrado en el que los fieles esperaban la obtención de una gracia divina; además provocaba un anhelo de construir que permitió un importante despliegue arquitectónico, tanto que gracias al gran fervor religioso engendró grandiosas construcciones.”
En España, a mediados del Siglo XIV, un joven campesino intenta terminar con el sistema feudal que se ejercía, instaurando un movimiento de rebelión campesina en Santiago de Compostela, su tierra natal. La mala calidad de vida y trabajo, y la hipócrita acción de los que gobernaban aquellas tierras, eran algunas de las causas de la protesta. Después de varias luchas, triunfos y fracasos, la acción revolucionaria iba a caer en un trágico enfrentamiento en la ciudad de Santiago, donde el joven después de pasar la noche herido en la catedral, es capturado por un grupo opositor de la clase más alta de la sociedad.
Después de cumplir varios años bajo el régimen feudal, huye, y peregrina a lo largo del Camino de Santiago en búsqueda de su libertad y delamor.

Capítulo 1 – El comienzo del camino

Pasan las horas, pasan los días, pasa la vida…
Hace varios días que la penumbra me agobia, el amanecer me contempla y la luna me acompaña, la tierra seca y húmeda siente mis pasos. Sólo veo su cara, o quiero verla, no sé si está acá, no sé si me acompaña, pero la siento presente. ¡Fue tan efímera su presencia que apenas vi su resplandor, su rasgada cara!
¿Qué será de ella? ¿Adónde se habrá dirigido? La verdad es que no lo sé, pero pronto lo sentiré.
El camino es largo, Santiago de Compostela me espera. Sin dudas, me precipita el deseo de volver a ver aquellos edificios, aquellas catedrales, aquellos monasterios, aquellos templos, el estilo románico viviente. Dicen que en ellos encontraré a mi Dios, que descubriré toda la grandeza de aquellas tierras, aquellas inmensas infraestructuras.
Estas edificaciones provienen de una combinación armoniosa de diversos estilos artísticos y arquitectónicos como el romano, el prerrománico, el bizantino y el árabe, entre otros. Su infraestructura es sorprendente; lleva un conjunto de sentimientos, de símbolos, de mensajes, de efervescencia religiosa.
Pero es difícil llegar allí, más en mi situación. Sin embargo, siento que allí volveré a ver su rostro, en medio del silencio del claustro, en las monumentales puertas de entrada, en el campanario que anuncia la unión de Dios con nosotros, en la ruta hacia la amada y esperada eternidad.
El calor de Toulouse me reprime; faltan días, horas y miles de caminos que atravesar, persecuciones que obviar; Quiero comenzar a sentir la libertad, aquel pleno ideal de la felicidad. No necesito más mandados ni esclavitudes, ni conformarme con el vil diezmo, ni con la protección ante las guerras, ni con aquellas prometidas tierras. Mi acción es un grito de rebeldía, un anuncio de encuentro con mi Dios y con ella.

Capítulo 2 – Pasado insaciable

Desde hacía años, mi vida era la de un simple y acobardado servidor, un criado que, sin embargo, tenía un alma insaciable y ganas de liberarse, de encontrar alguna solución. En estos tiempos y en estas tierras, no era sencillo sobrevivir. La nobleza nos tenía acorralados en una situación de la cual era trabajoso salir. Nuestro grito era el cambio, habíamos sobrevivido a varias luchas, de a poco íbamos generando un nuevo clima, pero una noche en Santiago, aquel grito dejó de sonar. Cerca de la catedral un grupo de infantería nos sorprendió y no supimos defendernos, muchos caían y nada podían hacer, la lucha por la liberación estaba en su peor momento, en un instante, no sentí nada más. De pronto abrí los ojos, vi a un hombre al lado mío, con aspecto desafiante. Él provenía de la más alta clase, de la indómita nobleza, estaba en un inmenso lugar, en cuyos prósperos campos miles de campesinos labraban la tierra.
Aquellos días fueron mi agonía; las duras horas trabajando la tierra agobiaban mi alma, agigantaban mis penas y en una sola cosa pensaba, pensaba en cómo acabar con estos mandados y estas sacrificadas tareas.
El tiempo pasaba y seguía pensando.
Una noche, vi a una extraña persona que rezaba arrodillada ante un altar. Lentamente, sin que nadie me viera, me acerqué y le pregunté quién era. Ella no me respondió y, en silencio, emprendió su retirada. Corrí rápidamente y la tomé de la mano; le pedí por favor que me diera una respuesta, pero siguió sin contestarme. Entonces la apreté más fuerte y al cabo me confió: “Soy Ana, hija de aquel terrible hombre, de aquel hombre que reprime a sus criados, que abandona a sus mujeres, que mata hasta al más cristiano. Un viejo hereje, prófugo y desafiante, sintiéndose ser de la nobleza y gobernando estas terribles tierras. La rebelión no es de su agrado, por lo cuál termina con todo aquel hombre que intente cambiar el sistema feudal. He pensado viajar hacia los reinos de España, en busca de mi propia religión, hacia aquella catedral de la cual todos hablaban”. Me quedé sin palabras, no supe qué responderle. Su rostro, al igual que el mío, se mostraba atónito. Mi acción no fue otra más que besarla; ella se mostró sorprendida y asustada (una voz se escuchaba desde el fondo). Ana se había ido y con ella se instauró mi nueva esperanza, mi nueva fe de que algo podría cambiar.
Al día siguiente, mientras trabajábamos, otro campesino me contó que, por la noche, alguien había escapado. Me dijo que lo estaban buscando, que cuando la encontraran su final llegaría rápido.
Mi mente quedó balbuceando, no tardé en pensar quién podría haber sido. ¡Seguro había sido ella! Sentí que debía hacer algo, algo para terminar con estas injusticias.
Esa misma noche, corriendo entre los campos, emprendí mi camino.
Cerca del amanecer llegué a un pueblo llamado Toulouse, en él me encontré con un grupo de gente esperando algo, estaban en la entrada de un Templo, donde me dijeron que descansaba San Saturnino un obispo y mártir. Otro me dijo que estaban emprendiendo un viaje hacia Dios, hacia la obra románica más deslumbrante de todos los tiempos, hacia aquel lugar donde descansaba el antiguo apóstol Santiago. No dudé en unirme a aquella peregrinación, ya que sabía que allí estaría mi verdadero hogar y aquella mujer que tanto me había sorprendido.

Capítulo 3 – Llegando a la frontera

Han pasado varios días y sigo en camino, he peregrinado por las tierras de Auch, otro pueblo francés. A algunos les he contado mi historia y me han escuchado; a mi lado hay varios campesinos, burgueses, cristianos, monjes y gente de otros lugares. Todos compartimos un mismo anhelo, un mismo fin, un mismo lugar hacia donde ir.
Mientras rodeábamos el valle de Aspe y llegábamos al puerto de Somport, un pequeño grupo de infantería obstaculizó el paso y nos detuvo unos momentos. Estaban buscando a alguien. Sabía quién era esa persona, no me iba a quedar quieto. La gente se puso molesta y la infantería comenzó a reprimir; algunos cayeron al piso y otros pedían orden. De golpe, sentí un frío filo en mi pierna y caí al piso. Después de un rato, la infantería se calmó y emprendió su retirada hacia el norte.
La gente estaba preocupada. Algunos seguían y otros dejaban la peregrinación; sin embargo, este último no era mi caso.
Un peregrino me ayudó y me curó la herida. Una vez calmados, visitamos las ruinas de del Hospital de Santa Cristina, aquél en el que había estado internado el monarca aragonés Sancho Ramírez.
Seguimos caminando y entramos en la esperada España.


Capítulo 4 – España nos recibe


Ya estábamos en tierras españolas y nos dirigíamos hacia el pueblo de Jaca. Transitamos por los pueblos de Los Arañones y Canfranc, la primera población hispana del Camino. Allí hablamos con algunos habitantes y paramos unos pocos minutos a descansar. Durante el descanso, no hice más que recordar a Ana, de recordar aquella noche en que había huido preocupado por ella. Pensé en cómo y dónde podría estar. Nunca me había sentido tan preocupado por alguien a quien sólo había conocido efímeramente. Tal vez esto significaba algo. ¿Sería amor? ¿Serían emociones? ¿Sería el camino para encontrar la libertad? La verdad es que no lo sabía. Los demás peregrinos me invitaron a seguir y continuamos caminando. Después de unas horas llegamos, a Villanúa donde vimos la iglesia de San Vicente; más adelante, ya en Aruej, nos encontramos con otra pequeña iglesia románica. Caminamos un trecho más y llegamos a Jaca. En el camino hacia el Puente de la reina, nos topamos con la ermita románica de San Juan Caprasio, el Monasterio románico de San Juan de la Peña, la Iglesia románica de Santa María (de la que me sorprendió su fachada y su triple ábside), entre otros muchos monasterios y obras románicas. Finalmente llegamos al Puente de la Reina, aquí finalizaba nuestro primer camino, llamado el camino aragonés. Ahora transcurríamos por el camino francés. Faltaban muchas horas y varios días, pero pronto llegaríamos.

Capítulo 5 – La noche de Burgos

Ahora nos tocaba transcurrir un nuevo camino hacia Santiago. Las noches se volvían largas; los días, cortos. Los pies sufrían y mi alma también. Seguía recordando y pensando. Así, pasaban los días y los pueblos, pueblos como Estella, Los Arcos (donde visitamos la hermosa iglesia de San Pedro de la Rúa), Logroño, Nájera, Santo Domingo de Calzada, Belorado (donde nos detuvimos a orar en la ermita de Nuestra Señora de Belén). Allí tuvimos que atravesar los llamados Montes de Oca, un lugar lacustre y abrupto de empinadas cuestas. Mientras subíamos, descansamos un rato, comimos y bebimos algo. De a poco, empezaba a sentir un nuevo aire, ese aire llamado libertad, una libertad de amor, oficio y religión. Reflexionaba acerca de lo que tenía cada pueblo, de sus iglesias, de sus edificaciones y me sorprendía, no podía entender cómo en mis tierras había tanta grandeza que no conocía, tanto espíritu cristiano, pero tampoco podía entender cómo había otra gente que hacía el mal, que mataba y perseguía, que se ocultaba y gobernaba. Todo eso instauraba un nuevo despertar en mi alma, un grito de cambio y rebelión.
Cuando retomamos la marcha, pasamos por el pueblo de San Juan de Ortega y seguimos hasta Santnovenia y Agés, y otros pueblos como Cardeñuela y Villafría. Entonces se sumaron a la peregrinación un grupo de hombres provenientes de la ruta del País Vasco; Uno de ellos me pareció misterioso, me miraba en forma extraña y observaba plenamente mis movimientos. En el momento no me preocupé y continuamos hacia Burgos.
Cuando entramos en la ciudad de Burgos, me sorprendió ver la cantidad de artesanos, mercaderes y hospitales. Sin embargo, lo más deslumbrante para mí fue su catedral. A diferencia de las que habíamos visto antes, ésta provenía del estilo Gótico y hacía poco que se había terminado de construir. Los demás peregrinos comentaban que su fachada se parecía mucho a las catedrales de París y de Reims. El templo mostraba una bella galanura gótica por doquier, por encima de los arcos formeros de la nave principal corría un hermoso triforio (con bellos arcos trebolados cobijados por arcos escarzanos, cuyo tímpano estaba perforado por cuadrifolios). En el interior del templo, había todo tipo de obras de arte: retablos, pinturas, entre otros. Al estar allí sentía a Dios demasiado cerca, me transmitía mucha armonía, paz y tranquilidad. No me sentía de esta manera desde hacía mucho tiempo, el fervor religioso brotaba incansablemente dentro de mí, me hacía sentir más cerca de la amada libertad, del esperado amor.
La noche se venía acercando y decidimos hacer un alto para descansar. Los pies estaban cansados, el cuerpo sufría sequía y nuestras mentes ya deliraban.
Para descansar, elegimos una especie de refugio para peregrinos. La noche de Burgos estaba algo inquieta, la lluvia se anunciaba y el viento soplaba incansablemente. En medio de la noche, sentí que algo se me acercaba, me di vuelta y era una mujer de largos cabellos negros y con un aspecto cansado de tanto caminar. No me parecía haberla visto durante la peregrinación. Me dijo que venía a buscarme, que traía noticias de Ana. Ella sabía que yo estaba aquí, pero yo no entendía cómo. Entonces me dijo que se dirigía a Santiago por las tierras del sur. Si quería encontrarla, debía acelerar mi marcha. Un grupo de soldados de su padre nos estaban buscando a ella y a mí. No tarde en levantarme, me vestí rápidamente y me fui. Enseguida comenzó a llover y el camino apenas se divisaba; emprendía mi último tramo, aquel tramo en busca del amor y la libertad.

Capítulo 6 – Ansiando el encuentro

Por los caminos dejaba mi huella, por los caminos dejaba mi esperanza, por los caminos dejaba mi vida, por los caminos la ansiaba a ella. Había pasado un mes desde aquella noche en Toulouse, un mes en el que no había vuelto a ver su rostro. Seguía peregrinando, pero esta vez sin gente a mi lado.
Me dirigía hacía León, otro destino importante. Mientras tanto, pasaban los pueblos de Hontanas (donde vi otra iglesia gótica), Frómista, Carrión de los Condes (donde volví a ver otras hermosas ermitas), Calzadilla de la Cueza (aquí me encontré con otra iglesia románica, cómo aquellas que había visto en las primeras etapas del camino), Sahagún, Reliegos y Archauelas. En este último pueblo, mi pensamiento se encendió otra vez, ahora comenzaba a pensar en qué haría cuando me encontrara con Ana. Por un lado, pensaba terminar mi peregrinación en la llamada Finisterre y luego de alguna manera terminar con lo que un día había luchado y anhelado, acabar con aquellos evasores, herejes y asesinos, fomentar nuevamente una revolución campesina, para que no hubiera más siervos, para que todos fuéramos simplemente ciudadanos con derechos, donde nuestro ansiado deseo de libertad no fuese obstaculizado por fuerzas mayores, hacer justicia por mis compañeros caídos aquella terrible noche en santiago; por el otro, pensaba en dejar florecer mi amor, o aquello que parecía ser amor.
Entré en la magnífica ciudad de León y observé todo su movimiento plenamente. Pude ver la Basílica románica de San, donde se guardaba el sepulcro de San Isidoro de Sevilla (un antiguo Obispo) y lo más maravilloso, la Catedral de León. Su interior era grandioso, lleno de armonía gótica. Allí pude apreciar un centenar de ventanas y tres grandes rosetones, con gran influencia francesa.
Faltaban pocos días y pocos pueblos. Al igual que ella, Santiago estaba cerca. Mi futuro se sentía presente y no hacía más que anhelar su llegada. Antes de partir, decidí escribirle una carta a Ana, una carta que, estaba seguro, que en algún momento le daría.

Capítulo 7 – Tinta y Alma

Mis versos comenzaban a plasmarse en un papel…

Desde una amarrada sombra has de partir
En mi sueño tu mirada enfrenta a la mía
Despojándome de la muerte amanecida
Sin tu amor no vale mi vida
Vivo sin vivir en mí
Dios me contempla desde lo alto
El abismo viene hacia mí
En mi yo no vivo ya
Peno por verte
Nuestro lazo tan fuerte
Producto de un efímero encuentro
Vive anestesiado sin una verdadera razón
Los caminos recorridos
El anhelo de pasión en mis días
El grito de libertad y de esperanza
Compartieron tus esperanzas
Mi amor encendido se encuentra contigo
Quiero ver tus ojos, renacer en ellos
Quiero gozar de tu fruto, vivir en él.
Quiero morir si hace falta,
Quiero combatir junto con tus ansías
Quiero gritarle al cielo, a Dios y a su Padre
Que mi amor hacia ti es inigualable.

El camino seguía, la carta dentro de mí había guardado, muchos pueblos pasaban, Santiago llegaba.

Capítulo 8 – El final del camino

Había transitado los pueblos de Astorga, Molinaseca, Villafranca, Triacastela, Sarria, de Rúa y muchos más que a los que no les había prestado la debida atención.
Mi mente quería pensar en una sola cosa, y no quería parar hasta conseguirla. Pero no todo andaba bien, algo extraño sentía en mi pecho; Una vil conmoción de sentimientos, la sospecha de que algo malo se aproximaba, pero no lo quería creer. Nada más creía en ella y en aquel encuentro.
Por fin, mi camino se terminaba, las tierras de Santiago de Compostela veían mi llegada. Esta vez sí quería prestar mucha atención a sus iglesias y distintas edificaciones, quería volver a ver mi tierra. Seguía manteniendo su aspecto medieval de hacía seis años. Me acerqué hacia la catedral, muchos sentimientos viajaban en mi mente. Lo cierto es que me impresionaba ver aquella inmensa construcción románica, su armoniosa cruz latina de tres naves, su tribuna, crucero, arcos, girola y capillas absidales. Ese aire puro y armonioso, la incansable presencia de Dios, el aroma de libertad, el silencio de los claustros, y sobre todo las cosas, el reencuentro con ella.


Capítulo 9 – El último grito

Me di vuelta sintiendo que Ana estaba ahí, desde cerca oía su respirar, sus manos tocaban mi espalda. ¡Ahí estaba ella! Mis ojos se llenaban de lágrimas, mi libertad se hacía presente al igual que aquel amor, mis palabras se arriesgaban a decir algo. Mis sentimientos se volvieron oportunos y, en medio de aquel silencio, de mis labios sonó un “te amo”. Sus ojos también lloraron y nos abrazamos. Me sentía completamente cálido; de a poco, ella se soltó y balbuceó: “Vámonos pronto de aquí, nos encontraron”. Mi cielo se caía y mis esperanzas también, pero no me iba a rendir. Corrimos por los claustros y salimos sin que nadie nos viera.
Sin embargo, un grito se oía y muchos pasos se aproximaban. Eran ellos, ¡nos habían encontrado! Ahí estaba su padre gritando. Sus hombres se aproximaron y la tomaron bruscamente. Me resistí y arrojé un golpe rápido, pero me agarraron fuertemente del cuello. Mientras la alejaban de mí, ella lloraba. Yo no me podía soltar y sólo pude decir estas palabras: “Desde lo más profundo de mi canto te doy mi corazón, por vos sufrí, por vos tengo la vida, por vos he de morir y por vos muero”. Mi anhelo no había sido alcanzado, sentía que nada había podido cambiar, que el grito rebelde se apagaba, al igual que mi alma. Mis ojos se cerraron, no vi más.
––Esto es lo que me ha pasado, no te pido que me perdones, dejala a ella y matame a mí. En un futuro tu vida caerá, los campesinos se rebelarán y la fuerza perderás. Dios nunca te perdonará el cielo no lo verás solo sentirás la muerte agónicamente, mi nombre nunca lo sabrás, sólo sabrás que de alguna forma he vencido ––proclamé.
––Cállenlo, ya de nada sirve ––ordenó.
––¡Mátenlo! Que sufra y olvide, él no ha triunfado y nunca triunfará, su Dios no lo salvará ––sentenció.
Las últimas palabras se escucharon, el grito de guerra se impuso. Pero éste no ha sido
el final; El futuro quedaba incierto y alguien lo podría cambiar….

FIN

Federico Gamba 2009

jueves, 19 de marzo de 2009

Libertad

El viento sopla fuerte
ventaja para adormecer
me pregunto si las palabras
valen para esta vez

Si aquel discurso
temible para nuestra piel
Nos fundia, en el silencio
en no querer ver

Comprendimos la pura razon
La dirección del camino
hacia la perdición
Hacia el fruto divino
de nuestra generación

Una palabra, una verdad
Una llave hacia la prosperidad...
La libertad...

Anhelo de victoria
Gemido en el amanacer
Revolución en la mente
en el ideal de vencer

Que lo ambiguo de las personalidades
Que lo distinto, de nuestras almas
Es todo de una misma piel
una puerta hacia la esperanza

Una palabra, una verdad
Una llave hacia la prosperidad...
La libertad...

Ni las ordenanzas,
Ni los que mandan
Ni los quieren el fuego de las armas
La van a detener

Los que hablan
Los que acusan
y no hacen nada
y solo quieren verte caer

solos van a caer

los que luchan por el bien
los que gritan y no callan
no se riden ante el poder

son aquellos que siento en mi alma
y no me hacen perder

y sentir...
la libertad...

En el refugio de dos cuerpos
En la hora de la lucha
En la busca de la igualdad, del amor, de la paz
En el sentido de la sociedad en busca de cambiar

En las penumbras del amor
En la calma de una palabra
En la suplica de Dios
En el llamado a la conciencia
en la felicidad, de encontrar..
La libertad...

entre la lucha por lo sensato

los que luchan por el bien
los que gritan y no callan
no se riden ante el poder

son aquellos que siento en mi alma
y no me hacen perder

y sentir...
la libertad...


Fede G. 09


sábado, 14 de marzo de 2009

Preludios sin final

a.Overture
b.Preludios
c.Ansias
d.Memento
e.Diem
f.Post-vida


Desperte bajo el crepúsculo
de tus sueños, de mi razón
Me atormente, aprendi a golpes
lo que es caer
sobrevivi, frente a la cornisa
me toca vivir
Respire, senti, la efervesencia
el carpe diem

Reencontre mi conciencia
mi inconciene a flor de piel
Renaci entra la penumbra
entre la locura de mi cien
Soñe un futuro
tan cambiante, tan real
Pero me encontre
contra una represion bajo mis pies

Destellos en mi mente,
Llenando mi alma
con tu estandarte
de lucha, arraigandome

Te digo que puedo, romper
La incomidad de tu ser
remando contra corriente
que más puedo hacer
no aprendi a ser
alguien más
nada más..

Si afuera brilla el sol, la luna solo descansara
Si afuera es la lucha, la vida cambiara
Si afuera esta tu amor, el dolor descansara
Si el fruto de tu vida, es querer cambiar

El tiempo pasa
inexorable a mis sentidos
La vida fluye
con un incierto camino
Tus ojos penetran
lo indomito de mi ser
Las cosas cambian
solo el placer puedo ver


Soy yo y mi circunstancia
mi consecuencia de ser
un hombre más

Soy yo y el tiempo
el extraño control
de los sucesos

Soy yo y mi Dios
el que sufre, muere
y agobia mi situación


Mientras que las pupilas, de nuestros ojos
sigan contemplándose cada día
Mientras que nuestra tieza piel
viva fundiéndose en una melodia
Viviré el presente, el futuro solo llega
la incertidumbre releva, la demencia
de la vida, de la escencia.

Quiero soñar y no creer
Quiero creer y no sentir
Quiero volver...

Cerrar los ojos, sentir
más alla...

Fede G. 09

miércoles, 18 de febrero de 2009

Genitive Mentis

Nuerotica destrucción
Imaginando, anhelando, otra sensación
Sublimando la superficie
despertando la razón

Cayendo por segundos
Derribando creencias
Concientizando la certeza
Agónica demencia

Arraigando la demencia
desatormentando los cielos
Ansiando el final
Cae sobre mi tiempo

Siendo una causa
Siendo una circunstancia
Siendo un ser
una vorágine clemencia

Conyugando las almas
descansando sobre el abismo
Utopía de vida, utopia de muerte
Miedo y resurección, Efimera sensacion

Arraigando la demencia
desatormentando los cielos
Ansiando el final
Caigo sobre mi cuerpo

Espiritismo demente,
no hay razones para ver
la diferencia consecuente

Relativismo y Positivismo
Escepticismo efervescente
Vueltas en el alma
cambiando la coraza

Arraigando la demencia
desatormentando los cielos
Ansiando el final
Caigo sobre mi cuerpo

Fede G. 09


jueves, 12 de febrero de 2009

Aquel otario

Los zapatas embarrados
el asfalto malgastado
la lluvia empapaba
sin vuelta nuestro andar

La noche iluminaba
mas que un camino concreto
solo era esa mirada
esa vil seducción

El amanecer, de Flores dormido
destellos sonmolientos de una noche atrás
la resaca idoltrada, no hace mas que castigar
recordar los hedonismos, de la angustia visceral

recordaras lo que ha dicho
alguna vez un hombre
que tuya es mi vida, que tuyo es mi querer
no olvidaras, las huellas del camino
ese indomito destino, la sabia del amor

Los andares y vueltas, las notas sin sentidos
La tinta derramada, en verso y canción
Un Fernet vacío, derramado en mi interior
buscando algun hospicio, alguna sensación

La vuelta en colectivo, otra noche más
calma e incertidumbre por volverla a ver
merecí sus ojos, pleno resplandor
de la vida inmaculada, de la partida, del amor

recordaras lo que ha dicho
alguna vez un hombre
que tuya es mi vida, que tuyo es mi querer
no olvidaras, las huellas del camino
ese indomito destino, la sabia del amor

Nada más que un otario sin sentido
Un niño partido, queriendo volver
Algo vulgar, mediocre adormecido
nada de eso me describe, solo el querer.

Volver a ver, sentir otra vez
plácidos encuentros, sombras del ayer
Volver a ver, sentir otra vez
milongas en tu nombre, recuerdos del ayer

Fede G, 09

sábado, 7 de febrero de 2009

Raices

Atormentandonos
en miles de crepusculos
soñando un mañana
esperando una esperanza

Ansiando la prosperidad
anhelo a la creencia
que la conciencia
puede malgastar
la mas pura certeza

Mil nombres y una voz
peligros de noches
la luna y el sol
se escondieran tras tu vuelta

Una triste canción
más que un llamado al interior
reflejo de lo moral
la duda compleja

Filosofia barata
garabatos en el alma
un papel mojado
por gotas de tu voz

Tiempo de revolución
anhelando la llegada
de un ser superior
de ausencia de dolor

Amor y desamor
inconciente mi sistema
controla nuestros sueños
la sentida efervesencia

Mil nombres y una voz
peligros de noches
la luna y el sol
se escondieran tras tu vuelta

Una triste canción
más que un llamado al interior
reflejo de lo moral
la duda compleja

Fede G. 09

miércoles, 14 de enero de 2009

Zen

Mareas, remosión
sin sentido
delirio ambiguo
en mi interior
terminando otra vez
resurgiendo en mi exilio,
de poder ver
la realidad cambiando
el sentido del zen

Atonitas verdades
escepticismo de paz
tranquilidad en mi mente
sueños invencibles
de un futuro distinto
del que nos toca apreciar
y sentir, y volar, regresar
llegar a alcanzar
el pleno ideal de cambiar

Meditanto desde
lo profundo de mi cien
Desde tu escencia
de poder amar sin temer
Buscando la paz del hombre
la dirección conciente
al remoto orden
a la vil imaginación
a la igualdad , al soñar

Fede G. 09

Diem

El tiempo pasa
inexorable a mis sentidos
La vida fluye
con un incierto camino
Tus ojos penetran
lo indomito de mi ser
Las cosas cambian
solo el placer puedo ver

Soy yo y mi circunstancia
mi consecuencia de ser
un hombre más

Soy yo y el tiempo
el extraño control
de los sucesos

Soy yo y mi Dios
el que sufre, muere
y agobia mi situación


Mientras que las pupilas, de nuestros ojos
sigan contemplándose cada día
Mientras que nuestra tieza piel
viva fundiéndose en una melodia
Viviré el presente, el futuro solo llega
la incertidumbre releva, la demencia
de la vida, de la escencia.

Fede G. 09

sábado, 10 de enero de 2009

La Fuerza del Sol

Sueño intrometido
destello fugaz
sombras inocentes
plegarias sin final

Niño que llora
agua que quema
la vida entrepida
completa mis esquemas

Llegando al sol
inminentes mis sentidos
al encanto feroz

Buscando encontrarme
Buscando encontrarte
Buscando un final
al preludio de mis sueños..
Buscando salida
buscando libertad
buscando un lugar
donde contemplar tu cielo

Viviendo sin prisa
sin rumbo ni final
oscuros diamantes
para lograr conquistar

palabras vacias
vil seducción
entrepido destello
de tu corazón

Rompo mi coraza
me asfixio en aquella
el bien, el mal
lo hecho y lo desecho

La calma contempla
la efímera codicia
los rayos que huyen
su máxima ciencia

me encuentro con vos...

Llegando al sol
inminentes mis sentidos
al encanto feroz

Llegando al sol
inminentes mis sentidos
al encanto feroz

Buscando encontrarme
Buscando encontrarte
Buscando un final
al preludio de mis sueños..
Buscando salida
buscando libertad
buscando un lugar
donde contemplar tu cielo

encandila mi mente, encandila mis sueños
delirio en mis recuerdos
todo contempla, la fuerza del sol...

encandila mi mente, encandila mis sueños
delirio en mis recuerdos
todo contempla, la fuerza del sol...
todo contempla, tu intrepido amor


Fede G. 09

Vox Dei (version II)

Vox Dei (version final)

a. Presencia
b. Percepción
c. Canto
d. Guerra
e. Llamado de resurección

Aguas claras del olimpo, me sacuden
Vientos desde los mas alto
de la incertidumbre , de la paz

Cima de una montaña, rios que recorren
desembocan en un mar
la tristeza y el llanto, nunca encontrarás

Imágen sutil, cuerpo sin fronteras
grito de salvación, de esperanza
de vil resurección

Voz salvaje, llamado a la curiosidad
naturaleza divina, que busca encontrar

Encantos voraz, cielos que pintan
la calma, la sensación de imaginar

injusticias, deben quedar atrás
solo el amor tiene que presenciar
igualdad , fraternidad,
nada de hipocresia, eso es la maldad

el llanto del hombre, concurre a su voz
sus enseñanzas, la fiel bendicion

El hombre no escucha su llamado
El hombre no entiende sus reclamos
El hombre se queja, de que su bendición
no le deja huellas

Talves no lo entienden, talves no lo sienten
o solo ingnoran, no creen en sus actos
no importa el hecho, no importa el milagro
importa el amor, los hermanos
el respirar, la vida y mas allá

No es la guerra, no es el fracaso
no es la muerte, solo es el amor
lo que nos esta mostrando

Poder econtrarlo, en el amanecer, en la tierra
en el amor , en los hermanos
En lo real de un canto, en la igualdad en la libertad
en la petición de las bocas, que todo quieren cambiar.

Que todo quieren cambiar, Que todo quieren cambiar.
Pero no escuchan su voz

Poder encontrar, toda su grandeza
dificil certeza, para toda la tierra

jueves, 8 de enero de 2009

Viento rózame

Verde hierba seca
vientos del sur campestre
danza a la tierra
magia por renacer

en la calma indomita
busco mi razón
de no ser uno más
entre tanta oscuridad

viento rozáme, llevame a tu encuentro
viento humano, muestrame tus regazos
sol naciente , color de la vida
nos vemos reflejados los dos
sin razón...

entre la penumbra
soy un ciego cazador
buscador de un cielo
atormentado y fugaz

dame la armonia
dame la simpleza de
poder encontrar
tanta locura real

viento rozáme, llevame a tu encuentro
viento humano, muestrame tus regazos
sol naciente , color de la vida
nos vemos reflejados los dos
sin razón...

desafiandome, despertandome
alcanzandome, expulsandome....

Fede G. 09


viernes, 2 de enero de 2009

Los Amigos (de Julio Cortázar)

Otro más del Julio.
Para la gente que siempre está presente.


En el tabaco, en el café, en el vino,
al borde de la noche se levantan
como esas voces que a lo lejos cantan
sin que se sepa qué, por el camino.

Livianamente hermanos del destino,
dióscuros, sombras pálidas, me espantan
las moscas de los hábitos, me aguantan
que siga a flote entre tanto remolino.

Los muertos hablan más pero al oído,
y los vivos son mano tibia y techo,
suma de lo ganado y lo perdido.

Así un día en la barca de la sombra,
de tanta ausencia abrigará mi pecho
esta antigua ternura que los nombra.


Julio Cortázar

Che (de Julio Cortázar)

Yo tuve un hermano.

No nos vimos nunca pero
no importaba.

Yo tuve un hermano
que iba por los montes
mientras yo dormía.
Lo quise a mi modo,
le tomé su voz
libre como el agua,
caminé de a ratos
cerca de su sombra.

No nos vimos nunca
pero no importaba,
mi hermano despierto
mientras yo dormía,
mi hermano mostrándome

detrás de la noche
su estrella elegida.

Julio Cortázar

La continuidad de los parques (Julio Cortázar)

Un cuento excelente de "Final del Juego" de 1956

Había empezado a leer la novela unos días antes. La abandonó por negocios urgentes, volvió a abrirla cuando regresaba en tren a la finca; se dejaba interesar lentamente por la trama, por el dibujo de los personajes. Esa tarde, después de escribir una carta a su apoderado y discutir con el mayordomo una cuestión de aparcerías volvió al libro en la tranquilidad del estudio que miraba hacia el parque de los robles. Arrellanado en su sillón favorito de espaldas a la puerta que lo hubiera molestado como una irritante posibilidad de intrusiones, dejó que su mano izquierda acariciara una y otra vez el terciopelo verde y se puso a leer los últimos capítulos. Su memoria retenía sin esfuerzo los nombres y las imágenes de los protagonistas; la ilusión novelesca lo ganó casi en seguida. Gozaba del placer casi perverso de irse desgajando línea a línea de lo que lo rodeaba, y sentir a la vez que su cabeza descansaba cómodamente en el terciopelo del alto respaldo, que los cigarrillos seguían al alcance de la mano, que más allá de los ventanales danzaba el aire del atardecer bajo los robles. Palabra a palabra, absorbido por la sórdida disyuntiva de los héroes, dejándose ir hacia las imágenes que se concertaban y adquirían color y movimiento, fue testigo del último encuentro en la cabaña del monte. Primero entraba la mujer, recelosa; ahora llegaba el amante, lastimada la cara por el chicotazo de una rama. Admirablemente restallaba ella la sangre con sus besos, pero él rechazaba las caricias, no había venido para repetir las ceremonias de una pasión secreta, protegida por un mundo de hojas secas y senderos furtivos. El puñal se entibiaba contra su pecho, y debajo latía la libertad agazapada. Un diálogo anhelante corría por las páginas como un arroyo de serpientes, y se sentía que todo estaba decidido desde siempre. Hasta esas caricias que enredaban el cuerpo del amante como queriendo retenerlo y disuadirlo, dibujaban abominablemente la figura de otro cuerpo que era necesario destruir. Nada había sido olvidado: coartadas, azares, posibles errores. A partir de esa hora cada instante tenía su empleo minuciosamente atribuido. El doble repaso despiadado se interrumpía apenas para que una mano acariciara una mejilla. Empezaba a anochecer.
Sin mirarse ya, atados rígidamente a la tarea que los esperaba, se separaron en la puerta de la cabaña. Ella debía seguir por la senda que iba al norte. Desde la senda opuesta él se volvió un instante para verla correr con el pelo suelto. Corrió a su vez, parapetándose en los árboles y los setos, hasta distinguir en la bruma malva del crepúsculo la alameda que llevaba a la casa. Los perros no debían ladrar, y no ladraron. El mayordomo no estaría a esa hora, y no estaba. Subió los tres peldaños del porche y entró. Desde la sangre galopando en sus oídos le llegaban las palabras de la mujer: primero una sala azul, después una galería, una escalera alfombrada. En lo alto, dos puertas. Nadie en la primera habitación, nadie en la segunda. La puerta del salón, y entonces el puñal en la mano. la luz de los ventanales, el alto respaldo de un sillón de terciopelo verde, la cabeza del hombre en el sillón leyendo una novela.


Julio Cortázar

Encrucijada (de Miguel Otero Silva)

Nos separaba de la calle
el cristal empañado de lluvia.
Yo estaba lejos del mundo,
hoja caída en el remanso de su llanto.



Ella era menuda y tierna
y se hacía más menuda entre mis brazos
y más tierna bajo mis ojos.

Entre nosotros y la calle
y la lluvia y el cristal de la ventana
eran dos abismos de plata.

La vida estaba allí naufragando en sus ojos
la belleza dormía en sus senos perfumados
la luz -toda la luz- se me daba en su boca
la humanidad - mi humanidad - era ella.

Más allá del cristal
más allá de la lluvia
pasaron...

Yo separé los ojos de los ojos de ella
para verlos pasar.

Marchaban chapoteando en el barro
los pies descalzos.
Desfilaban los rostros anochecidos de hambre.
Y las manos encallecidas de miseria
y las almas curvadas de injusticia
y las voces amanecidas de odio
desfilaban los pies descalzos.

Iba la madre con el hijo al cuadril
y el anciano rumoreando penas.
Y el mozo flameando la bandera,
iban de frente hacia la vida
armoniosamente rebeldes.

No sé si me lo gritaron ellos
o si me lo grité yo mismo.
Pero en las filas, de los que pasaban
estaban mi puesto, mi bandera y mi grito.

El cristal empañado de lluvia
esfumaba los rasgos de la calle
por donde pasaban los míos.
Volví los ojos hacia ella
que se hacia casi yo entre mis brazos

y le dije:

- Me llaman los que pasan.


Sus ojos empañados
me separaban de su alma
como el cristal con lluvia
me separaba de la calle.

Me dijo lentamente:

- No te vayas.


Y se hizo más menuda entre mis brazos
y me ofreció su boca palpitante
y sentí junto a mi, temblorosos sus senos.

Yo escuchaba chapotear en el barro
los pies descalzos
y presentía los rostros anochecidos
de hambre.

Mi corazón fue un péndulo entre
ella y la calle...


Y no sé con qué fuerza me libré
de sus ojos
me zafé de sus brazos.
Ella quedó nublando de lágrimas
su angustia.

Tras de la lluvia y del cristal
pero incapaz para gritarme:
- ¡ Espérame !

¡ Yo me marcho contigo !

Llénate de mí (de Pablo Neruda)

Llénate de mí.
Ansíame, agótame, viérteme, sacrifícame.
Pídeme. Recógeme, contiéneme, ocúltame.
Quiero ser de alguien, quiero ser tuyo, es tu hora,
Soy el que pasó saltando sobre las cosas,
el fugante, el doliente.

Pero siento tu hora,
la hora de que mi vida gotee sobre tu alma,
la hora de las ternuras que no derramé nunca,
la hora de los silencios que no tienen palabras,
tu hora, alba de sangre que me nutrió de angustias,
tu hora, medianoche que me fue solitaria.

Libértame de mí. Quiero salir de mi alma.
Yo soy esto que gime, esto que arde, esto que sufre.
Yo soy esto que ataca, esto que aúlla, esto que canta.
No, no quiero ser esto.
Ayúdame a romper estas puertas inmensas.
Con tus hombros de seda desentierra estas anclas.
Así crucificaron mi dolor una tarde.

Quiero no tener límites y alzarme hacia aquel astro.
Mi corazón no debe callar hoy o mañana.
Debe participar de lo que toca,
debe ser de metales, de raíces, de alas.
No puedo ser la piedra que se alza y que no vuelve,
no puedo ser la sombra que se deshace y pasa.

No, no puede ser, no puede ser, no puede ser.
Entonces gritaría, lloraría, gemiría.

No puede ser, no puede ser.
Quién iba a romper esta vibración de mis alas?
Quién iba a exterminarme? Qué designio, qué? palabra?
No puede ser, no puede ser, no puede ser.
Libértame de mí. Quiero salir de mi alma.

Porque tú eres mi ruta. Te forjé en lucha viva.
De mi pelea oscura contra mí mismo, fuiste.
Tienes de mí ese sello de avidéz no saciada.
Desde que yo los miro tus ojos son más tristes.
Vamos juntos. Rompamos este camino juntos.
Ser? la ruta tuya. Pasa. Déjame irme.
Ansíame, agótame, viérteme, sacrificarme.
Haz tambalear los cercos de mis últimos límites.

Y que yo pueda, al fin, correr en fuga loca,
inundando las tierras como un río terrible,
desatando estos nudos, ah Dios mío, estos nudos,
destrozando,
quemando,
arrasando
como una lava loca lo que existe,
correr fuera de mi mismo, perdidamente,
libre de mí, Curiosamente libre.
¡Irme, Dios mío, irme!


Pablo Neruda

Viaje Astral

Demencia en los sentidos, en la razón
Deseo de imaginar, otros vuelos, otra realidad
Sentir caer , sentir levantar
Recompensa voraginal, anhelo de alcanzar

Ojos sin antifaz, cielo, mar y más alla
llegar hacia un lugar, regresar y delirar
Sentirte capaz de caer, en un mundo ideal
Libertad, sensación, igualdad
Ante todas las cosas, perservar

Inminente a tu razón, escepticismo capaz
Poder encontrar, un espejo, una clara mentalidad
Sentir más allá, poder respirar, vientos de calma fresca
Amor por la libertad

y sentir, e imaginar, y llegar y alcanzar
demostrar y perservar, la justa realidad
efimera sensación de perder
ganar y enloquecer

psicodelia subversible
letra voraz, sin explicación capaz
finalizando en lo atónito de la mente
en el subdelirio de la realidad

sentir más allá, viaje astral
demencia racional
penetrar más allá, viaje astral
amor, respeto y libertad

Fede G. 08

Circus I

Entiendo y no entiendo
aventuras del carpe diem
Monologos sin final
de un Dios superior

Superviciencia a alcanzar
tintes dañinos de una cruel soledad
Angustias, desechos
de infortunios sin brillar

Cuadrado imperfecto
que demuestra ser perfecto
pantalla inteligente
que a la inteligencia suele tapar

Algo que alcanzar, no se puede imaginar
Sol, día y noche, todo puede cambiar

Situaciones efimeras
con algun sentido
Brotando en mi mente
contrarestando mis sentidos

Revolución atónita
llamado a la conciencia
vorágines sin descanzo
en la mente del cambiante

Circo mediático
catastrofe y realidad
actuación sin sentido
pero que a todos suele despertar

Algo que alcanzar, no se puede imaginar
Sol, día y noche, todo puede cambiar

Estandarte voraz,
ideal sin algo que marcar
Realidad demencial
nada se puede esperar

Algo que alcanzar, no se puede imaginar
Sol, día y noche, todo puede cambiar

Fede G. 08

Circus II

más otra vez
naufrágos en la memoria
en la verdad, en la razón

tinte en la claridad
la luz del sol,
espejismo claro
de una insomia elección

sed de imaginación
producto de una
extraña seducción
otra vez, sólo ver

segundo plano
de la vil demostracíon
de lo incauco de la vida
de la agonía en acción

aproximación a la fortuna
del temible luchador
soledad absoluta
efimera sensación

de tratar....
de elegir....
de cambiar...

actuaciones sin sentidos
escepticismo voraz, empezar....
circo medíatico
catástrofe y realidad

Coito ganado,
talves sin frustación
espectro que busca
su temible ocupación

de tratar....
de elegir....
de cambiar...

finisterre, aproximado al exilio
la lucha del sol, por cambiar los sentidos
me encuentro, sólo con vos

Fede G. 08

Amoenus

El viento roza mi ser
verde pastizal envolviendome sin cesar
largo río, hacia el horizonte, va
sin apuros, armonía de libertad

Varios seres me acompañan
crepusculos del día, del amanecer
de la vida misma, me hacen ver
que no hay a nadie quien obedecer

Prados candentes, la lluvia marca mi camino
aspero y frenético ruido, empaña mis oidos
el llamado de la tierra a encontrarme con mi mismo

Largas horas de paz y tranquilidad
suspiros que huelen, a la amada libertad

Largas noches de ver, la semilla efervecente
la escencia natural, el fruto de la vida

Hierba matutina, sensaciones de soñar
Lugar placentero, más que observar
Sentir, llegar, alcanzar, conquistar
ideales que marcar, no quiero regresar

Mi mente se encandila con el efecto natural
la idea de irte, y nunca llegar
la idea de penetrar en un mundo,
donde lo natural es obviado por el humano animal

Largas horas de paz y tranquilidad
suspiros que huelen, a la amada libertad

Largas noches de ver, la semilla efervecente
la escencia natural, el fruto de la vida.

Fede G. 08

Vox Dei

Aguas claras del olimpo, me sacuden
Vientos desde los mas alto
de la incertidumbre , de la paz

Encantos voraz, cielos que pintan
la calma, la sensación de imaginar

Cima de una montaña, rios que recorren
desembocan en un mar
la tristeza y el llanto, nunca encontrarás

Voz salvaje, llamado a la curiosidad
naturaleza divina, que busca encontrar

Imágen sutil, cuerpo sin fronteras
grito de salvación, de esperanza
de vil resurección

Poder encontrar, toda su grandeza
dificil certeza, para toda la tierra

El hombre no escucha su llamado
El hombre no entiende sus reclamos
El hombre se queja, de que su bendición
no le deja huellas

Poder econtrarlo, en el amanecer, en la tierra
en el amor , en los hermanos
En lo real de un canto, en la igualdad en la libertad
en la petición de las bocas, que todo quieren cambiar.

Que todo quieren cambiar...


Fede G. 08


Su verdad

Fuimos culpables de este juego
Nos fuimos los dos a la par
Como explicar lo que perdi
Si vos eras mi unico sentir

Noches empapadas de amor
Sueños dificiles de alcanzar
Como pensar, si nada salia mal
Pero esta vez el fracaso me ganó

Me quedo esperando otra vez
Talves algun dia te acuerdes de mi
Me juego la vida por tenerte
Cerca mio otra vez

Fuimos dos almas condenadas al amor
Dos muertos en pie
Aveces la victoria no esta a tu favor
Aveces el amor es un error

Y nos quedan mil caminos por recorrer
Pero todo ha de torcer
Sé que ya no te acuerdas de mí
Yo todavia te tengo aquí

Sigo dando vueltas, no paro de pensar
El miedo me consume y ya no puedo mas
Mi unica salida es no mirar

Subo y bajo, vuelvo a caer
Me asfixio con tu infierno, nada puedo hacer
Solo me queda olvidarte mujer

Olvidarte, no pensar más
Olvidarme, de todo tu bienestar
Encontrar, alguna señal

Para que me diga lo que puedo hacer
Para que me ayude a encontrar
Toda su verdad

Fede G. 07

Sombras de princesa

Allá a lo lejos , se esconde su voz
la luna no ilumina , y el sol no cura las heridas
Cuento dificil , sus ojos se ven en la penumbra
busca su presa , se hace fuerte ante ella

Sumergida en la locura , con lagrimas cristalidas
juega con su encanto , te muestra su otro lado
Durmiendo al alba , la noche la levanta
camina entre cartones para llegar a la meta

Su cuerpo de mujer , baila una danza fiel
Su vida le jugó mal , ella no supo que hacer
El placer de su encanto , brilla en las noches oscuras
Su mirada te envuelve en rios de locura

Cae el sol , su mandato vuelve
dias ágonicos , la moneda busca
Condenada a sobrevivir , la felicidad la espera
Mirando de reojo la muerte la azecha

Se enfierra al placer de cada alma
cada boca que suspira la lleva a la agonía
Buscando el fruto divino , ella los mira
Si la felicidad esta en el sol , ella ya la tendria

Sumergida en la locura , con lagrimas cristalidas
juega con su encanto , te muestra su otro lado
Durmiendo al alba , la noche la levanta
camina entre cartones para llegar a la meta

Su cuerpo de mujer , baila una danza fiel
Su vida le jugó mal , ella no supo que hacer
El placer de su encanto , brilla en las noches oscuras
Su mirada te envuelve en rios de locura

Fede G. 07

Continum

Camino solo , voy buscando algun lugar.
Me pregunto , porque todo anda tan mal.
Oidos sordos , miles de preguntas sin contestar.
Todo esta girando , mi cabeza va a estallar

Caigo al piso , veo que es lo que puede pasar.
Todo esta cambiando , ya no veo la realidad
Algo en mí quiere sonar , algo empieza a vibrar
Voy perdiendo el control ya no tengo vuelta atras

Me demencia me aturde, genera mi ansiedad
Necesito un poco mas de vos, otra sensación
Siento que todo puedo alcanzar, que la suerte me acompañará.
Que ya nada quedará atrás, otra vez voy a soñar.

Siempre caigo en el mismo lugar.
Siempre busco y nada puedo encontrar
Nunca sé donde pisar
Nunca sé que pensar


FedeG. 08

Ríos de locura

Si el brillo de tus ojos
mojan como gotas de tormenta
Si tu cuerpo tiezo no me abriga
hoy no es el dia de encarar la alegria

Bebiendo tu néctar mas puro
quiero embriagarme , embriagarme de amor
Si con vos toco las estrellas
quiero alucinar otra vuelta con vos

Me enfierro al olvido , luchando como un dios
No quiero castigos , solo quiero tu voz
Me acuesto en tu nido , me siento inferior
Me atrapa , me envuelve , me siento mejor

Si tu condena no es dura y no lastima
entrego mi libertad
si el precio de tus ojos es caro
pagaré con voluntad

Sintiendo tu veneno mas puro
te brindo mi alma que ya ni siento
Si la lucha no es el precio
hoy pierdo y abandono mis deseos

Me enfierro al olvido , luchando como un dios
No quiero castigos , solo quiero tu voz
Me acuesto en tu nido , me siento inferior
Me atrapa , me envuelve , me siento mejor
Si despues de esta tormenta sale el sol
le digo a la muerte que me espere , que tu corazón me encontró

Fede G. 07

Recuerdos de un amor

Recuerdo de un amor

Si al llegar a la cima siempre te sentis honrado
esta vez el precipio me queda mejor
Tanto me demostró esta pasión
que ahora solo me queda el consuelo de mi error

Dar un paso al costado , nunca es la solución
Dejar tus sueños , nunca es la salvacion
El pasadizo hacia la felicidad esta en vos
Yo lo perdi , y nunca lo volveré a ver

El horizonte y el mar , lo mas bello de nuestro andar
la ruta y el sol , el camino hacia la imaginación
la tinta , la musica y tu alma: la maravilla soñada
tantas alegrias , son el recuerdo de nuestro amor.

Al despertar , mi vacio se siente presente
ya no hay nada que explique esta dura situación
Necesito un remedio que calme mi sed
Me desidrato si no recibo tu calor

Vendo mis penas , solo quiero que desaparezcan
volare por las alturas intentando no volver a caer
buscaré tu corazón otra vez
y siempre viviré con él

El horizonte y el mar , lo mas bello de nuestro andar
la ruta y el sol , el camino hacia la imaginación
la tinta , la musica y tu alma: la maravilla soñada
tantas alegrias , son el recuerdo de nuestro amor.

Fede G. 07

Peregrino de la nada

En trenes que vueltan alto de la felcidad
viaja entre la locura y la realidad ,
suemergido en gotas cristalidas
que le hacen ver el mal ,
se entera que nadie ni nada le brindara felicidad.

Lleva su cruz cargada , mochila que lo tira para atras
si da un paso hacia adelante , un cruel viento lo derribara
no tiene las fuerzas necesarias para llegar al final
sobre el abismo dormira , su sombra no se verá

Su corazon dispara gotas que nunca cesaran
peregrina en la locura , en la nada de la realidad
tierra prometida nunca encontrará
el sabe que su meta es la felicidad.

Aunque el precio nunca sea el correcto
el luchara por lograr su felicidad
Sabe que es dificil , y que su alma se derribara
Peregrino de la nada , hoy tu verdad conoceras

Será turbia , complementada con angustia
sera dificil de abordar , pondras un punto y final
No dejes nunca de soñar . sin esa brisa
nunca volveras a imaginar.

Su corazon dispara gotas que nunca cesaran
peregrina en la locura , en la nada de la realidad
tierra prometida nunca encontrará
el sabe que su meta es la felicidad.

Fede G. 07

Buscando

Refugiado del viento y
de la marea
De la noche oscura, de la vida
de la mentira.
Caminando baldosas, que me llevan
Hacia vos, hacia ese maldito corazón.

Voy a buscar un lugar, donde guardar
Nuestros sueños , nuestra vida, tu voz

Sentido, sin un sentido, me muestra
la marca de mi reloj
Las horas que van , las horas que vienen
Por donde sale mi sol
La tinta escrita, derramada en verdad
En verso y canción, me lleva
Hacia vos, hacia ese inmenso dolor

Voy a buscar un lugar, donde guardar
Nuestros sueños , nuestra vida, tu voz

Volveras a ningun lugar, al desvelo de soñar
Volver a ese lugar, a la vida regresar

No habrá más historias, ni marcas
que muestren el pasado de mi corazón

Donde escapar, ¿otra realidad?
algo de eso me podra cambiar
Donde imaginar , si no hay lugar
capaz de demostrar

No habrá más historias, ni marcas
que muestren el pasado de mi corazón

Voy a buscar un lugar, donde guardar
Nuestros sueños , nuestra vida, tu voz

Si uno gana una vez despues de perder
se da cuenta que la suerte roza su ser
Si uno pierde mil veces también
se da cuenta que siempre puede vencer


Fede G. 08

Ojos de blues

Estoy tratando de volver a ver
Esos ojos , que me hacian creer
Que no estaba solo en este mundo infiel.
Que me daban fuerza para no volver a caer

Y Ahora sigo preguntandome porque
Tu ausencia peturbó mi ser
Porque cada hora y cada dia no me demostrabas nada fiel
Y Me queda solo una moraleja
Olvidarme de vos , seguir y avanzar otra vez

Y Sigue Pasando el tiempo y me vuelvo esclavo de él
Sueño sus ojos que me hieren sin saber
Que yo soy el alma que cerca quisieras tener
Que yo soy el único que puedo volver a creer

Y Sigue Pasando el tiempo y me vuelvo esclavo de él
Sueño sus ojos que me hieren sin saber
Que yo soy el único que puedo volver a creer
Sentir tu alma y en tus ojos volver a creer

Mil Versos

Tanto tiempo pasó
tantas veces me dijiste
que esto no tenia direccion

Tantos sueños que imaginamos
tantas metas que alcanzamos
hoy se mueren con un fin

Será que nada viste , será que nada quisiste
y hoy por eso no te tengo mas aqui
Hoy no veré por tus ojos mi camino
veré tanta oscuridad frente a mí


Si nos quedaramos, aniquilados
daria mil versos por verte volver
Si nos quedaramos , aniquilados
daria mis sueños por verte volver

Tanta magia , tantos deseos
hoy me muero sin tu consuelo
Cuando llege mi hora , le dire adios
que vengo solo , que mi compania en las sombras se quedo


Será que nada viste , será que nada quisiste
y hoy por eso no te tengo mas aqui
Hoy no veré por tus ojos mi camino
veré tanta oscuridad frente a mí


Si nos quedaramos, aniquilados
daria mil versos por verte volver
Si nos quedaramos , aniquilados
daria mis sueños por verte volver


Fede G. 06

Cuando sienta

Cuando siento tu olvido
Cuando me pierdo entre el ruido
Cuando caigo de un suspiro
Siento tu conflicto , Marco mi destino

Cuando me quedo vacio
Sin palabras en mi juicio
Cuando busco el camino
Me siento perdido

Y una lagrima en tus ojos
puede curar mi castigo
y un sueño en el olvido
puede enfrentar a mi destino

Cuando siento tu presencia
mi alma se acelera
Cuando cruzo esa frontera
tu cuerpo se me aleja

cuando pierdo en tu juego
cuando me acuerdo lo vivido
Cuando grito en tu oido
hoy aqui te necesito

Y una mano de un amigo
puede ayudarme en mi camino
Y una huella marcara
el camino de nuestro destino

cuando me vengan a buscar
me quedare sentado , esperando verte pasar
y ya no me queda nada ,y ya no siento nada
solo espero , tu mirada

Y una lagrima en tus ojos
puede curar mi castigo
y un sueño en el olvido
puede quebrarme de un suspiro
Cuando sienta tu castigo.

Fede G. 07

Entonar

Entonar

La Noche grita algo que no ves
Desvastada por querer tener
La Vida gira, todo mira y renace
Desde lo más oscuro, de los confines de tu piel.

Empezar otra vez, duda queda, todo va.
Una Realidad consecuente a mis pies
Me destrona , me desacralizará

Nubes, Cielo, Agua y Mar.
Tierra, cantos, fronteras y más alla.
Esperanzas, sueños y libertad.
Amor esperando, húmeda piel.

Mira todo otra vez
Contempla el llanto, el divino querer.
Un Mañana distinta al ayer
No Reacciona, no.

Sin un verdadero sentido
Nada tiene alguna explicación
Conquista, revancha y caer
Podo claro, poco amor para esta ocasión.

Caemos en la cuenta del que mundo
es mundo y no lo ves.

Que la libertad y el amor, son más fuerte
que toda una nación.

El que no quiere ver, no es ciego
si no un perdedor.

El que no quiere mirar, no hace más
que fracasar.

Entonar, canción, verso y razón
Entonar, amor, viento y corazón.
Entonar, fuego, vida y libertad.
Entonar, derechos, tierra e igualdad.
Entonar, cultura, esperanza y fé
Entonar, paz, todas las cosas que algo pueden cambiar.

Fede G. 08

Derrotado

Derrotado

Miro al cielo y veo una gota caer
De color oscuro , triste al parecer
Ella amenaza con apagar nuestro amor
Su incógnito destino no me da alguna explicación

Caigo al suelo sin tocarlo
Me encuentro sumergido en mareas atónitas
Miles de grietas me quiebran
Y Mi destino no deja huellas

Cielo caido , sueños heridos
Amores vacíos , la felicidad eh perdido.

La luna te mira y te pide que te acuestes con ella
El mar te siente y otra vez lo endulsas.
Tus amores sacuden la tierra
Y Me provocan una angustia eterna

La lluvia borra tus ausencias
Y Siento que te tengo
Pero estas muy lejos
Tan lejos de todo
Que ni arriba te sienten
Tu vida ya ni siente.

Cielo caido , sueños heridos
Amores vacíos , la felicidad eh perdido.
Derrotado otra vez , sin sentido de vivir
Mi agónico cielo me pide que ya
No quiere sufrir.

Fede G. 07

Chacarera del sol

Esquivando sueños
sumergidos en el olvido eterno
sigo y me encuentro con vos

Tratando de ver, tantas cosas
tantas metas y ningun camino
me encuentro a tu lado
prendido en una canción

si tengo miedo,
es porque sufri primero
si no te recuerdo
es porque algo borro mis sueños

Miles de vasos vacios
cartas sin sentidos
espectros sin razon

Convulsiones en mi mente
en el recuerdo inminente
de algun prendido amor

si tengo miedo,
es porque sufri primero
si no te recuerdo
es porque algo borro mis sueños

vamos cambiando de colores
de caminos y de encuentros
vamos buscando un destino
una certeza al oido

que me ayude a olvidar aquellos sentidos
que me ayude a renacer y florecer denuevo
que me ayude a no perder lo perdido

Ocasos sinietros, amores olvidados
fotos guardadas,
en el fondo del cajón

Sábanas acaloradas, y mil encuentros
que quedan como recuerdo en mi interior

ruinas en la noche, danzas refugiantes
chacarera y canción

si tengo miedo,
es porque sufri primero
si no te recuerdo
es porque algo borro mis sueños

vamos cambiando de colores
de caminos y de encuentros
vamos buscando un destino
una certeza al oido

que me ayude a olvidar aquellos sentidos
que me ayude a renacer y florecer denuevo
que me ayude a no perder lo perdido

desde el sol, de la vida, de la libertad, del recuerdo
desde el sol, de la vidad, del amor que ya no tengo

desde el sol, de la vida, de la libertad, del recuerdo
desde el sol, de la vidad, del amor que ya no tengo
que no recuerdo...

Fede G. 09

A la realidad

Padre hoy yo te vengo a contar
como es la realidad
Como puedo vivir
en medio de la vil soledad

Se que te has ido por luchar
y para poder formar
algun futuro digno
para nuestra comunidad

Vos me enseñaste
que lo digno era luchar
no dejarme derrocar
por los brotes de hipocrisidad

Pero hoy la avaricia
de algunos impresentables
juzgan mi condicion
el presente, mi arraigada vida

Nos venden una historia
para que le compremos
el guión mas semejante
a la hipocricidad

La negligencia de algunos impostores
me estan perjudicando
me estan desterrando

Sabes dificil que es pelear
en un mundo lleno de desigualdad
donde la libertad que queremos
presenta un sortilegio de maldad

miles de sueños caidos,
cuerpos hambrientos
vacios gigantes,
compuestos por el desprecio

porque tenemos que lidiar asi
no se que polo elegir
mi eleccion deambula
entre el vivir o morir

Nos siguen prometiendo
inminentes futuros
pero al fin y al cabo
lo inminente es el olvido

solo

Mirá mi techo, mirá mi hogar
Mira lo que hice
algo tan efímero, pero tan real

Hoy nos toca sembrar
un mundo para mejorar
Paz, libertad y amor
un sufragio para nunca obviar

padre hoy te vengo a contar
como es mi realidad
que puedo elegir
para no morir más...


Fede G. 08

Incógnito destino

Comprendimos distintos caminos
Elegimos la indomita razón
Corregimos mil acciones
Pero siempre algo quedó

Nos miramos en plena soledad
Ocultamos el dolor
Entendimos que de lo malo
Algo bueno tenia que pasar


Sentimos mil prejuicios
Balbuceamos nuestro interior
Pero siempre nos jugamos
Por el vorágine amor

Pero nada quedó...

Nuestro camino, en falso giró.
Nos mostro el verdadero error
Lo improvisto nos sorprendió
Incógnito destino, sin explicación


Mente inmunda de dolor
De locura, delirio y confusión
Un suspiro, una palabra al vacío
Un vaso vacío y una canción

Sentimos mil vacios
nos amamos en nuestro interior
Pero no advertimos
El camino al dolor

y así todo cambió...

Todo gira entorno a vos
Todo siente tu sensación
Mi icógnito destino
Sueña que un día vuelvas vos


Fede G.08

Muerte en vida

Otra vez me he vuelto un ciego
Sin razon de ser , algun hombre mas
Solo he esperado el momento perfecto
para decirte lo que que siento

Miles de palabras no bastan
Si no dicen algun sentimiento
Miles de sentimientos no bastan
Si no dicen lo cierto

Solo me guio por la luna , por vos y tu mirada
Me siento vacio , sin nada porque temer
Lo unico que puedo perder , es ese amor
Que me destruye sin razon

Para Morir Hay que vivir soñando
Para vivir hay que morir mirando
Para sufrir hay que vivir lastimado
Para renacer hay que morir en vano

Para Estar con vos
Hay que vivir , Sufrir , Morir
En tu corazon cerrado

Otra vez me han definido como un pajaro sin vuelo
Sin poder levantarse luego de un tropiezo
Asi es como me buscan , excusado por amor
simple , sin sentido , como tu corazon

Miles de besos no bastan
Si no demuestrar algun sentimiento
Miles de victorias no bastan
Si despues se apagan

Y he quedado en el medio del camino
que divisa lo fragil y lo fugaz
Ya no vuelvo a mirar hacia atras
la luz me indica hacia donde patear

Para Morir Hay que vivir soñando
Para vivir hay que morir mirando
Para sufrir hay que vivir lastimado
Para renacer hay que morir en vano

Para Estar con vos
Hay que vivir , Sufrir , Morir
En tu corazon cerrado

Para estar con vos
hay que morir en vida


Fede G. 07

A la muerte nomás

Una ruta bidireccional , te lleva a un consuelo desigual
con su atrozidad amenaza , en tu rio salvaje hoy desagotara
un limite sin frontera , un corazon que cesa
con amor incondicional por querer ver su grandeza.

Fuertes vientos rozan tu ser , solo uno de ellos podra ver
lo que tan cruel es su escasa sed.
Descarrilado sin direccion , azecha tu corazon
que fruto busca? , solo sé que se guia por tu perdición

La grandeza del mar , las olas y la ciudad
Reflejan tu vida , este rápido pasar
a voluntad de la grandeza mas misteriosa
iras a parar

Nadie sabe donde tu felicidad
estara sumergida en lo profundo del mar ,volando en lo inmenso de la oscuridad
ahi perdurará.

Fede G. 07

No sé

Siempre vuelo alto intentando no caer
Pero tu amor hace que me derribe esta vez
Como explicarlo , sin tan solo al verte siento esto
Como decirlo , si lo tuyo no es el miedo.

Y ya no esperare otra vez
Me daré por vencido al vencer
Y ya no daré mil vueltas otra vez
Seguiré andando hasta vencer

Es por tu amor , que ami todo me falta
Es por vos, que no encuentro mi alma
Es por vos, que mis lagrimas no bastan
Será por vos que en la vida algo me falta

Ahora vuelvo a empezar
A empezarme a preguntar
Que será de todos nuestros sueños
Que borramos con el tiempo

Ni una dulce melodía
Podrá curarme esta herida
Ni una lagrima caida
Podrá demostrar mi agonia

Es por tu amor , que ami todo me falta
Es por vos, que no encuentro mi alma
Es por vos, que mis lagrimas no bastan
Será por vos que en la vida algo me falta

Acto de pasión

Sabanas al diván
Magnitud fraternal
para volverla a mirar

Sueños mal heridos,
Sangre derramada
Por un solo corazón

Solo encuentro un ideal
Amor y felicidad , ¿quien da más?
¿Quien cura mis heridas?
¿Quien hoy sabrá amar?

Desgarros eternos
de una amarga pasion
que florecen , en el vientre
de tu maldición

Miles de cruzes sin sentido
intervienen en mi sitio
Miles de estacas me apuñalan
son gotas que de mis ojos rebalsan

Solo cuestiono mi andar
Amor y Amistad , ¿Qué está mal?
¿Quien me salva de este pozo?
A lo lejos se encuentra tu verdad

Mil destinos dirijidos hacia el placer
Bella mujer , con silueta de actriz
Simula su afecto hacia mi

Caigo otra vez en su juego
El viento me lleva , la malvad me roza
No ecuentro un consuelo
Solo quedo en su acto de pasión.


Fede G. 07